Peloides
Fecha
2004Autor
Sánchez Rodríguez, Luis
Fagundo Castillo, Juan Reynerio
Metadatos
Mostrar el registro completo del ítemResumen
El empleo de sedimentos con fines terapeúticos se remonta a la más lejana antigüedad. Las propiedades curativas de estos productos naturales no debieron pasar inadvertidos al hombre primitivo que en continua relación con la naturaleza, tomaba de ella todo lo que contribuía a mejorar sus condiciones de vida. Ya en tiempos recogidos por la historia se describe, en papiros de la duodécima dinastía egipcia, la utilización de los barros de las márgenes del Río Nilo; como remedio curativo en aplicaciones sobre el cuerpo y exponiéndolo al sol. En épocas más recientes, Plinio el Viejo utilizaba sedimentos marinos y de ríos calentándolos para su uso. Galeno recomendaba las fricciones con arcilla tibia para el tratamiento de inflamaciones. Juan de Dondis, en 1370 sugería la aplicación de barro sobre los miembros que presentaran afecciones subcutáneas. Miguel de Savonarola preconizaba fricciones con barro para mejorar los problemas articulares y Margarita de Valois describía en su libro Heptameron, los baños de barro aplicados en el balneario de Canterest a principios del siglo XVI. Sin embargo, el concepto de peloide es relativamente moderno, ya que fue en 1933 que el Comité Internacional de Medidas aceptó este término general para los sedimentos naturales de uso terapeútico, y la Sociedad Internacional de Hidrología Médica en 1949 lo definió como: los productos naturales consistentes en la mezcla de un agua mineral, comprendida el agua de mar y la de los lagos salado, con materia orgánica o inorgánica, resultantes de procesos geológicos o biológicos, o a la vez geológicos y biológicos, utilizados en terapeútica en forma de aplicaciones locales o baños. The use of sediments for therapeutic purposes goes back to the most ancient times. The healing properties of these natural products should not have gone unnoticed by the primitive man who, in a continuous relationship with nature, took from it all that contributed to improve their living conditions. Already in times collected by history, the use of mud on the banks of the Nile River is described in papyri of the twelfth Egyptian dynasty; as a healing remedy in applications on the body and exposing it to the sun. In more recent times, Pliny the Elder used marine sediments and rivers warming them for their use. Galen recommended frictions with warm clay for the treatment of inflammations. Juan de Dondis, in 1370 suggested the application of mud on the members who presented subcutaneous affections. Miguel de Savonarola advocated frictions with mud to improve joint problems and Margarita de Valois described in his book Heptameron, the mud baths applied at the Canterest resort in the early sixteenth century. However, the concept of peloide is relatively modern, since it was in 1933 that the International Committee of Measures accepted this general term for natural sediments for therapeutic use, and the International Society of Medical Hydrology in 1949 defined it as: natural products consisting of the mixture of mineral water, including seawater and that of salty lakes, with organic or inorganic matter, resulting from geological or biological processes, or at the same time geological and biological, used in therapeutics in the form of local applications or bathrooms. (Traducción automática)