dc.description.abstract | Las quemas agrícolas, durante la estación seca en la -vertiente Pacífica de Panamá, constituyen un importante fenómeno ecológico. Durante este período, más del 10% de la superficie terrestre sufre los efectos de las quemas dando lugar a la producción de grandes cantidades de carbón. La mayoría permanece en la tierra, pero el 5% es transportada por los ríos y vientos hacia los sedimentos del Golfo de Panamá. El transporte de las partículas de carbón por los vientos alisios que soplan del NE fue medido por colectores de deposición seca y de aerosol. Las concentraciones de carbón en el medio rural de Panamá durante la época de las quemas, se aproximan a las de las zonas urbanas de Norte América y Europa. Más del 60% de la masa de carbón en el aerosol aparece en forma de partículas finas (< 2 μm -de diámetro) lo cual sugiere que es posible que se transporten a grandes distancias. Los flujos de deposición seca, correlacionados directamente con la extensión de superficie quemada, son más de una orden de magnitud menor que los flujos de carbón a los sedimentos costeros marinos del Golfo de Panamá. Esto implica que el transporte eólico no es el mecanismo principal de movilización del carbón de las quemas a los sedimentos costeros. Los altos valores de desagüe por unidad de área, en la vertiente del Golfo, sugieren que éste es el mecanismo principal de transporte. Por otra parte, el carbón puede servir como indicador de las quemas históricas. En 1979 se obtuvieron núcleos de sedimentos del Golfo de Panamá. Para determinar las velocidades de sedimentación, en la región, se sometieron los núcleos a análisis de radioplomo (Pb-210). Las partículas de carbón fueron aisladas por métodos químicos y se analizaron sus flujos, distribuciones de tamaño y morfologías. La uniformidad de estos índices en los sedimentos marinos durante 200 años de deposición indica que los patrones de las quemas han sido estables por dos siglos. Agricultural burning, during the dry season in Panama's Pacific coast, is an important ecological phenomenon. During this period, more than 10% of the land Surface it suffers the effects of burning, giving rise to the production of large quantities of coal. Most remain in the land, but 5% is transported by rivers and winds to the sediments of the Gulf of Panama. The transport of carbon particles by the trade winds that blow from the NE was measured by dry deposition and aerosol collectors. Coal concentrations in rural Panama during the burning season are close to those of urban areas in North America and Europe. More than 60% of the mass of carbon in the aerosol appears in the form of fine particles (<2 μm-in diameter) which suggests that it is possible for them to be transported over long distances. The dry deposition fluxes, correlated directly with the extent of the burned surface, are more of an order of magnitude less than the carbon fluxes to the coastal marine sediments of the Gulf of Panama. This implies that wind transport is not the main mechanism of mobilization of coal from burning to coastal sediments. The high drainage values per unit area, on the Gulf slope, suggest that this is the main transport mechanism. On the other hand, coal can serve as an indicator of historical burning. In 1979, sediment cores were obtained from the Gulf of Panama. To determine the sedimentation rates, in the region, the nuclei were subjected to radioplomo analysis (Pb-210). The carbon particles were isolated by chemical methods and their flows, size distributions and morphologies were analyzed. The uniformity of these indices in marine sediments during 200 years of deposition indicates that the patterns of burning have been stable for two centuries. | es_ES |